Si estás pensando en viajar a Jordania, seguramente tendrás en tu lista de imprescindibles visitar Petra, la ciudad rosa de los nabateos, una de las maravillas del mundo. Pero lo que quizás no sepas es que cerca de Petra hay otro yacimiento arqueológico que merece mucho la pena conocer: la pequeña Petra, también llamada Siq al-Barid, el cañón frío. Lee atentamente porque estamos seguro de que te va a sorprender.


Índice de Contenidos

  1. 1. Qué es la pequeña Petra
  2. 2. Cómo llegar a Siq al-Barid desde Ammán
  3. 3. Qué visitar en Siq al-Barid
  4. 4. Curiosidades sobre la pequeña Petra
  5. 5. Motivos principales para visitar Siq al-Barid

Pequeña Petra en Jordania

 

Qué es la pequeña Petra

La pequeña Petra es un antiguo asentamiento nabateo situado a unos 14 km al norte de Petra, en una zona montañosa y desértica. Al igual que Petra, se caracteriza por tener edificios tallados en las paredes de arenisca de un estrecho cañón de unos 450 metros de longitud. Su nombre árabe, Siq al-Barid, significa el cañón frío, porque recibe muy poca luz solar y mantiene una temperatura fresca durante todo el año.

La pequeña Petra, se cree, que fue fundada en el siglo I d.C., cuando los nabateos dominaban el comercio en la región. Probablemente era un suburbio de Petra, donde vivían los comerciantes más ricos y donde se alojaban los viajeros que llegaban por la Ruta de la Seda. También se piensa que era un centro religioso, donde se celebraban rituales y banquetes en honor a los dioses nabateos.

La pequeña Petra forma parte del parque arqueológico de Petra y está incluida en la lista del patrimonio mundial de la UNESCO desde 1985. A diferencia de Petra, la entrada a la pequeña Petra es gratuita y suele estar menos concurrida de turistas, lo que la convierte en una visita muy recomendable para los amantes de la historia y la naturaleza.

 

Cómo llegar a Siq al-Barid desde Ammán

La forma más cómoda y rápida de llegar a la pequeña Petra desde Ammán es en coche propio o alquilado. El trayecto dura unas tres horas y media. Una vez en Wadi Musa, el pueblo más cercano a Petra, hay que seguir por una carretera local que bordea las montañas hasta llegar al desvío hacia la pequeña Petra, donde hay un aparcamiento gratuito.

Otra opción es ir en taxi desde Wadi Musa o desde Petra. El precio puede variar, pero se puede conseguir por unos 20 euros ida y vuelta. Es conveniente acordar con el conductor que espere mientras se visita el lugar, ya que puede ser difícil encontrar otro taxi para volver.

También existe la posibilidad de ir en una excursión organizada desde Ammán o desde Wadi Musa, que incluya la visita a la pequeña Petra junto con otros lugares de interés como Madaba, el Monte Nebo o el Mar Muerto. Aunque la mejor forma siempre será ir en un viaje organizado con tus propios guías ya que te facilitar aprovechar tu estancia lo máximo.

Portada de Siq al-Barid

 

Qué visitar en Siq al-Barid

La visita a la pequeña Petra se puede hacer en una hora o dos, dependiendo del ritmo y el interés de cada uno. Lo más destacado es recorrer el cañón y admirar las fachadas esculpidas en la roca, que muestran la habilidad y el refinamiento de los nabateos. Algunos de los edificios más importantes son:

  • El triclinio: se trata de una sala con tres bancos donde se celebraban banquetes rituales.
  • El templo de Dushara: es el edificio más grande y alto del cañón, dedicado al dios principal de los nabateos.
  • La casa pintada: es una de las joyas de la pequeña Petra, donde se descubrieron unos frescos del siglo I d.C. que representan escenas de la vida cotidiana, animales, plantas y figuras mitológicas. Los frescos se han restaurado y se pueden ver en una cueva protegida por una reja.
  • Las habitaciones altas: son unas construcciones situadas en lo alto del cañón, a las que se accede por unas escaleras talladas en la roca. Se cree que eran viviendas de los comerciantes más ricos o lugares de culto.
 

Curiosidades sobre la pequeña Petra

La pequeña Petra es un lugar lleno de historia y misterio, que guarda algunas curiosidades que quizás no sepas:

  • Tiene una conexión subterránea con Petra, que se usaba como vía de escape en caso de asedio o ataque. Sin embargo, esta conexión está cerrada al público por motivos de seguridad y conservación.
  • Cuenta con un sistema hidráulico muy avanzado para su época, que permitía recoger y almacenar el agua de lluvia en cisternas y canalizarla a través de tuberías de arcilla hasta las fuentes y los edificios.
  • La pequeña Petra tiene una inscripción en griego que dice: “Aquí Symachos el más bello bebió vino con sus amigos”. Se trata de un grafiti del siglo II d.C. que muestra la influencia de la cultura helenística en los nabateos.
  • Podrás visitar el biclinio, o sala de dos bancos, donde se conservan unas pinturas al fresco que representan a Dioniso. Estas pinturas son un ejemplo único de arte figurativo nabateo y de arte helenístico a gran escala.
 

Motivos principales para visitar Siq al-Barid

 Si todavía no te has convencido de visitar la pequeña Petra, aquí te damos algunos motivos por los que no deberías perdértela:

  • Es un lugar con mucho encanto e historia, que te permite conocer mejor la cultura y el arte de los nabateos, una civilización fascinante que dominó el comercio y la ingeniería en el Oriente antiguo.
  • Es un lugar tranquilo y relajado, donde puedes disfrutar de la naturaleza y el silencio, lejos de las aglomeraciones y el ruido de Petra. Además, al ser gratuita la entrada, puedes ahorrar algo de dinero en tu viaje a Jordania.
  • Es un lugar sorprendente y original, donde puedes descubrir algunos tesoros ocultos como los frescos de la casa pintada o las vistas desde las habitaciones altas. También puedes hacer algunas fotos espectaculares con las fachadas talladas en la roca como fondo.

En conclusión, la pequeña Petra es un lugar que merece la pena visitar si viajas a Jordania, ya que te ofrece una experiencia diferente y complementaria a la visita a Petra.